Parece que después de cuatro años después de publicar su último álbum, Wincing the Night Away, el grupo de James Mercer se decide a grabar nuevo material. Bueno, esto un alivio, ya que después de tanto tiempo y sobretodo a que Mercer parecía muy ocupado (demasiado para mi gusto) en su proyecto paralelo, Broken Bells, algunos creían que el grupo podía haber desaparecido de facto... sin avisos oficiales ni nada. Y que queréis que os diga: The Shins es uno de los grupos que más me han impactado en la última decada y quedarme solo con los tres LP's que han publicado, me sabía a poco (aunque por otro lado, Jimmi Hendrix solo sacó tres LP... y hasta el momento ningún álbum de The Shins ha sido malo... a ver si el cuarto trabajo resulta ser un bodrio y me arrepiento de estas palabras)
Pero no es de New Slang ni de su primer álbum, Oh Inverted World, de lo que os quiero hablar (aunque también os lo recomiendo fervorosamente), sino de su segundo trabajo y para mi punto álgido de su carrera, Chutes Too Narrow.
Destacar una canción de este disco se me hace difícil, sus diez canciones son de una calidad impresionante... y es de agradecer porque, ¿cuantos LP's hay donde solo dos o tres canciones se salvan y el resto es prescindible? Así que en el dilema de escoger una canción, empezaré por una de las menos conocidas pero mi preferida entre todas: Mine's not a high horse. Fijaos en un detalle que me encanta: la batería va a todo trapo pero queda en un segundo plano como un efecto sonoro y la canción sigue un medio tiempo que marca la guitarra rítmica.
Y además tienen también uno vídeo-clips muy chulos (bueno de la anterior canción no, justamente) pero si no me créeis mirar este Pink Bullets. Si además de no gustaros, no os conmueve la vaca de papiroflexia, es que habéis cambiado vuestro corazón por un trozo de negro carbon o tenéis fobia a los animales de papel. Que sepáis que en mi entorno esta canción a quedado bautizada como "la de la vaca triste" y que si me pilla el día tonto hasta se me escapa la lagrimilla. Toda una belleza de canción.
Y otra de las canciones con un vídeo especial es Saint Simon. Las centenares y miles de mariposas que podréis observar no son un efecto especial añadido al clip, sino que esta grabado en El Rosario de las Mariposas, una reserva natural en Michoacan, México, donde millones de mariposas emperador realizan la metamorfosis y proporcionan un espectáculo natural de primera magnitud (me queda un poco lejos y no soy un aficionado a los documentales de La 2, así que si: lo he buscado en internet). Ah, y la canción también está muy muy bien, que en el fondo es lo que más importa.
En definitiva, un álbum del que espero no os arrepintáis después de haberlo escuchado. Normalmente no soy tan entusiasta en mis recomendaciones (si en mis críticas, hay cosas que no se pueden justificar como la última canción de JLo... para fusilarla al amanecer) pues entiendo que no ha todo el mundo le tiene que gustar lo mismo... pero en este caso haré una excepción y que salga el sol por donde quiera.